Las aftas bucales se definen como úlceras que se producen en la mucosa de la boca, y constituyen una de las enfermedades bucales más frecuentes, junto con la caries.
En líneas generales, son de pequeño tamaño (unos 5 milímetros), tienen un color blanquecino y están rodeadas por un área roja. Suelen persistir durante unos días y normalmente se curan de manera espontánea en una a dos semanas.
Causas de la aparición de aftas bucales
- Causas mecánicas: por un mordisco involuntario, un restauración dental que produce roce, una limpieza dental excesivamente agresiva, etc.
- Debido a cambios hormonales.
- Estrés emocional.
- Infecciones víricas originadas por patógenos diferentes al herpes virus (en este caso se denominan herpes).
- Por alteraciones del sistema inmunitario, como es el caso de las alergias alimentarias.
- Factores hereditarios.
- El uso de determinados fármacos.
- Por causas desconocidas.
Como prevenir las aftas bucales
Para prevenir la enfermedad se recomienda:
- Llevar una higiene bucal adecuada.
- Tener una dieta variada, rica en frutas y verduras.
- Consumir alimentos ricos en vitamina C y omega-3.
- Evitar comidas muy calientes.
Cuándo consultar al médico
Consulta con tu médico si presentas lo siguiente:
- Aftas inusualmente grandes.
- Aftas recurrentes, que se presentan después de que sanan las anteriores, o brotes frecuentes.
- Aftas persistentes, que permanecen durante dos semanas o más.
- Aftas que se extienden hacia los labios .
- Dolor que no puedes controlar con medidas de cuidado personal.
- Dificultad extrema para comer o beber.
- Fiebre alta junto con las aftas.
- Consulta con tu dentista si tienes superficies de dientes filosas o aparatos dentales que parecen provocar las aftas.